1955 fue un año histórico para las mexicanas, quienes votaron por primera vez. No fue una concesión, fue un derecho arrancado por la lucha colectiva que lideraron mujeres como Elvia Carillo Puerto, Hermila Galindo, entre otras, durante la Revolución en la búsqueda de igualdad de derechos para las mujeres; lucha que continuaron y ampliaron muchas otras, como Juana Gutiérrez de Mendoza y Concha Michel y miles de campesinas y maestras en los años 30. La histórica llegada a la presidencia de México de la primera mujer, Claudia Sheinbaum, en 2024, es fruto de esa lucha. No llegamos todas, pero las que llegaron, no lo hicieron solas. Hoy más del 50% (18) de las entidades están gobernadas por mujeres, incluidas las 2 entidades donde habitan poco más del 20% de los 130 millones de mexicanas y mexicanos: Ciudad de México y el Estado de México; 22 entidades han legalizado el aborto, reconociendo el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo; la atención de las mujeres se ha elevado a nivel de una secretaría de estado. Las mujeres seguimos resquebrajando el techo de cristal, aunque estamos aún lejos de romperlo.
No obstante el notable avance en el empoderamiento político de las mexicanas (México actualmente se encuentra en el lugar 14 de 146 países en este subíndice), la violencia y desigualdad contra las mujeres también es bastante notable. Los feminicidios siguen siendo una pandemia que arrebata la vida a 10 mexicanas por día (ONU Mujeres); las principales víctimas de trata son mujeres y niñas (74%); 27 mil mujeres han sido desaparecidas entre 2006-2024, escalando el número de desaparecidas cada año. Las mujeres siguen ganando menos que los hombres, por cada 100 pesos que recibe un hombre, una mujer recibe sólo 65 pesos; a lo cual hay que sumarle la carga de tareas domésticas y de cuidados sin salario. Nuestro país ocupa el lugar 119 de 146 países en el subíndice de brecha salarial del Índice Global de Brecha de Género. El machismo, tan arraigado en nuestra cultura, obliga que las mujeres casadas tengan 21.5% menos de probabilidad de emplearse, que las mujeres no casadas; algo similar sucede con las mujeres con infancias con respecto a las que no tienen infancias. Décadas de lucha han logrado que más mujeres ocupen espacios políticos y de decisión, pero desgraciadamente esto no han implicado en la misma medida políticas públicas, sociales, económicas, culturales, para el logro de la igualdad plena.
Y peligrosamente, en respuesta al progresisimo que ha ganado terreno, notablemente en Latinoamérica, y con los logros feministas que generalmente le acompañan, la derecha se reestructura y rearma. La llegada del payaso ultraderechista Milei a la presidencia de Argentina y de Trump y su gabinete fascista en EUA, son resultado del trabajo de la derecha por recuperar terreno; lo que no solo implica llegar al gobierno, sino borrar toda política y derecho que beneficie a las/los trabajadores, a las mujeres y minorías, que busque disminuir desigualdades: entre pobres y ricos, entre hombres y mujeres, entre blancos y no blancos. Por ello, la derecha combate la lucha de las mujeres por la igualdad, incluso financiando grupos de choque, disfrazados de organizaciones, que ataquen activamente derechos de las mujeres, como el aborto o el castigo a violentadores y abusadores sexuales. En nuestro país, está el caso actual del grupo de camisas azules, ligado a empresarios y políticos de derecha, centrado en defender como “inocentes” a acusados de delitos contra mujeres e infancias; armando campañas de desprestigio contra fiscales mujeres y denuncias falsas contra las victimas.
Por ello, este 8 de marzo las mujeres mexicanas saldremos a exigir igualdad, libertad, respeto, que no nos maten, que no haya más madres buscadoras buscando a sus desaparecid@s, que haya justicia, que en todo el país se establezcan fiscalías especiales para delitos contra mujeres, como es el caso en CDMX.
¡Ni una mujer asesinada más!
¡Las mujeres luchando, al mundo transformando!
¡Por la liberación de las mujeres!
¡Ni machismos, ni capitalismo!
Nos vemos en la marcha, este 8 de marzo a las 11:30 am a un costado del Hotel Imperial Reforma, esquina Morelos y Paseo de la Reforma.
Ubicación: https://maps.app.goo.gl/zf9RsDwAW3CQkabn8?g_st=aw
MOVIMIENTO SOCIALISTA DEL PODER POPULAR